En Avellaneda se levanta una catedral que sorprende no por su antigüedad, sino por su modernidad. Fue inaugurada en 1984, lo que la convierte en la más joven de toda la provincia.
Se trata de la Catedral Nuestra Señora de la Asunción, un edificio de líneas simples y modernas que rompe con el estilo clásico de otras iglesias bonaerenses.

“Es una catedral distinta, pero igualmente imponente”, destacan los vecinos.
El templo se transformó en un símbolo de renovación arquitectónica dentro de la tradición religiosa bonaerense.

